Cuando un director técnico arriba a un club lo primero que quieren saber los hinchas es como va a parar a su equipo y que estilo de juego tratará de imprimirle. Pues viniendo de Diego Dabove, quien hoy en el día de su cumpleaños cuarenta y ocho firmaría contrato por una temporada con San Lorenzo, se sabe que es un entrenador directo en el trato personal y de fácil comprensión para los jugadores.
Por haber integrado los cuerpos técnicos de Miguel Angel Russo, Miguel Angel Brindisi y Américo Gallego, por ejemplo, trae consigo cosas de la vieja escuela. Sin dejar de lado lo moderno que supo absorber al lado de Néstor Gorosito, Diego Cocca y Sergio Batista, entre otros. Entonces, sin definirse como miembro de una determinada escuela, Dabove va de la vieja utilización de los videos a las nuevas tendencias del GPS y del drone.
En cuanto a lo táctico tiene dos esquemas preferidos: 4-3-3 (como jugaba en Godoy Cruz) y 4-2-3-1 (según lo visto en su último paso por Argentinos Juniors). Además, sus equipos se caracterizan por tener un juego dinámico y ofensivo. Pero equilibrado del medio para atrás con el objetivo de no quedar mal parado. Nada complicado, más bien práctico y sencillo.
Sin embargo, más allá de toda consideración, como en San Lorenzo las experiencias con los últimos técnicos no fueron buenas, el trabajo de Diego Dabove estará bajo la lupa desde el primer día. En Boedo no hay paciencia ni margen para soportar otro fracaso. Pero si logra superar ese obstáculo, sin dudas, habrá dado un importante paso para conquistar el reconocimiento de los sanlorencistas.
