La directiva de San Lorenzo está abocada a conseguir refuerzos y con la venia de la Conmebol ahora podrán ser seis, y no tres, los cambios a realizar en la lista de buena fe para jugar los octavos de final de la actual Copa Libertadores de América.
En el radar del CASLA hay varios candidatos que podrían potenciar su plantel. Los que están más cerca de transformarse en nuevos jugadores azulgrana son Gonzalo Rodríguez, que tiene el pase en su poder tras quedar en libertad de acción de la Fiorentina, y Víctor Salazar lateral derecho de Rosario Central tasado en dos millones de dólares.
Gonzalo Rodríguez que se inició en las divisiones formativas de San Lorenzo, fue parte del plantel que ganó la Copa Sudamericana en 2002 bajo la conducción de Rubén Darío Insua, quien lo promovió a Primera división.
Otro futbolista que interesa por Boedo, es el volante Gabriel Gudiño, de Atlético Rafaela, por quien ya existen negociaciones en marcha. En tanto que otro puesto a reforzar es el de delantero. En ese aspecto fueron ofrecidos Mariano Pavone (también pretendido por Estudiantes) e Ignacio Scocco (aunque su cotización es muy elevada).
De los veintiún jugadores que están a préstamo en otras instituciones y que a fin de mes deben reintegrarse al plantel, los que tienen más posibilidades de quedarse son el volante central Facundo Quignón (de Newell’s) y el delantero Nicolás Reniero (de Almagro), pedidos por Diego Aguirre.
En cuanto a salidas, la semana que viene en San Lorenzo esperan una oferta millonarias del Montreal Impact de la MLS (donde está jugando Ignacio Piatti) por Ezequiel Cerutti. En tanto que Marcos Angeleri tiene posibilidades de regresar a Estudiantes.
