Luego de la consagración, Walter Herrmann, elegido el Jugador Mas Valioso de las finales, estuvo a la altura de las circunstancias. San Lorenzo lo fue a buscar para intentar hacer algo grande y tanto hizo que terminó siendo campeón. "Nunca me imaginé de chico jugar en San Lorenzo y menos ser campeón", dijo emocionado el Conde que supo sacar fuerzas de donde es muy difícil hacerlo cuando la vida lo golpeó muy duro. Por eso la dedicatoria final "para mi hermana que está en España, para mis hijos, mi mujer y para la familia que tengo en el cielo".
Al hablar de los partidos ante La Unión, de Formosa, un rival que pese al 0-4 no se la hizo fácil a San Lorenzo, detalló que "la serie fue durísima. Hay que sacarse el sombrero para con los jugadores de La Unión y el cuerpo técnico. Hicieron una liga impresionante. Ellos fueron los campeones del Norte, nosotros del Sur y creo que somos justos ganadores de La Liga".
Y siguió "a partir de los playoffs, mostramos nuestra mejor cara. En la primera reunión nuestra planteamos ganar todos los partidos como sea. Ningún jugador estuvo por encima de este título, y por eso conseguimos este logro".
Luego admitió que "para mi que soy hincha del club, esto es un sueño. Nunca me imaginé de chico jugar en San Lorenzo al básquet. Siempre escuchaba con mi viejo por radio los partidos de fútbol. Pero nunca imaginé que iba a estar en San Lorenzo y ser campeón en básquet".
También admitió que "ser elegido el MVP significó un plus. Pero eso no me llena tanto como haber conseguido este título". Al ser consultado por si continuará un año más, dejó la pelota picando: "Eso no lo sé, un día quiere una cosa y al otro una diferente. Por eso, vamos a bajar las revoluciones y a pensar con tranquilidad".
