La novela de Paulo Díaz está escribiendo un nuevo capítulo. Mientras el club Palestino insiste en querer meter la cuchara en la transferencia del Bombero, Colo Colo le dio pista libre al zaguero central para que viaje y ya está en nuestro país realizándose la revisión médica. Claro, que en Chile los árabes no están contentos y puede haber problemas.
Para ponerle un poco de luz a este asunto, el Cacique emitió un comunicado en el que deja constancia de su manera de actuar en este caso. "Informamos que nunca hemos tenido en nuestros planes vender el pase del jugador ya que fue un proyecto deportivo de largo plazo y estaba considerado por el Cuerpo Técnico. Sin embargo, estas semanas hemos recibido varias ofertas directas del Club San Lorenzo de Almagro de Argentina, y debido a la insistencia del jugador, su representante y el Club Palestino, hemos revisado la posibilidad de efectuar la venta", dice el comunicado.
"El día de ayer hemos recibido una última oferta de San Lorenzo por la compra del 100% de los derechos federativos y el 50% de los derechos económicos todos de propiedad del Club Colo-Colo, oferta que esperamos llegue a buen puerto. Para una mayor claridad nuestra Institución nunca ha acordado con el Club Palestino ceder de manera conjunta un 25% del pase cada uno, Colo-Colo puede vender su participación en cualquier momento como establece el contrato".
Por lo tanto, el jugador viajó a nuestro país para sumarse al plantel de Pablo Guede a cambio de un millón de dólares que irán a parar a la tesorería de Colo Colo de la siguiente manera: 500 mil a la firma de los contratos y luego dos cuotas de 250 mil pagaderas a uno y dos meses vista. De esta forma, el DT azulgrana tendrà en sus filas al defensor por el que tanto insistió, siempre y cuando Palestino no haga ninguna presentación en contrario.
