lunes, abril 15, 2019

Empate y otra actuación decepcionante del equipo

San Lorenzo no lo supo ganarlo y Huracán, que jugó la última media hora del clásico con diez jugadores, terminó festejando el 0 a 0 para definir la llave el viernes que viene en su estadio. Poco y nada entregó el equipo cuervo que se retiró de la cancha bajo una cortina de silbidos, mientras que los jugadores del conjunto quemero se abrazaban en el medio de la cancha.

El primer tiempo fue chato, con un juego aburrido y previsible. Con San Lorenzo asumiendo la responsabilidad de protagonizar el partido, sí. Aunque sin poder superar su propia impotencia. Mientras Huracán, sin ambiciones, se dedicó acortar los posibles circuitos de juego de su rival. Y así San Lorenzo se quedó sin ideas.

El Ciclón buscó hacer ancha la cancha y atacar por afuera con el intermitente Juan Camilo Salazar y Marcelo Herrera por la derecha y con Da­mián Pérez y Nahuel Barrios por el otro sector. Pero sin eficacia, ya que los centros nunca encontraron la cabeza se un compañero para que defina en posición de gol.

El Globo fue tan amarrete en ofensiva que en los primeros cuenta y cinco minutos nunca pateó al arco. En tanto que las pocas aproxi­maciones de San Lorenzo, tampoco convellevaron demasiado peligro para Fernando Pellegrino.

En el complemento, dentro de iguales lineamientos, San Lorenzo siguió exhibiendo las mismas carencias en el trato de la pelota al no acertar tres pases seguidos. Mucha pose­sión y poca determina­ción para encarar hacia el arco de enfrente.

Para colmo, una vez que Huracán se quedo con uno menos, por la correcta expulsión de Lucas Mero­lla, los jugadores de Almirón cayeron presa de la desesperación al ver que pasaban los minutos y no en­contraban ese pase hacia adelante que necesitaron durante todo el partido. Y que jamás encontraron.

En cambio, el Globo cerró filas, dejo venir a San Lorenzo para recuperar la pelota y salir rápido a espaldas de los vo­lantes, con el fin de aprovechar el desorden azulgrana. De esa forma, los quemeros tuvieron tres chances claras para ponerse en ventaja con las cuales, pese a tomar tantos recaudos, estuvo a dos tapadas de Fernando Monetti y un remate apenitas desviado de ganar el partido.

En defini­tiva, el empate final dejó abierta la serie para que se defina en la revancha a jugarse en el viernes en Parque Patricios.