lunes, diciembre 25, 2017

El perjuicio de no jugar la Copa Libertadores

Después de cuatro años consecutivos, en 2018 San Lorenzo no participará de la Copa Libertadores, lo que le causará una severa disminución en sus ingresos. Su ausencia en el torneo de Conmebol más importante a nivel clubes lo privará no solo del prestigio que conlleva disputarlo, sino que además de sumar un ingreso importante traducido en dólares debido a la diferencia existente con los premios que reparte la Copa Sudamericana. Y ni que hablar, también, en materia de recaudaciones.

Los equipos que jugarán la fase de grupos de la Libertadores cobrarán, de parte del ente organizador, 600 mil dólares por partido jugado de local, es decir que embolsarán 1.800.000 verdes en total. En cambio, como la disputa de la Sudamericana es con enfrentamientos mano a mano, aquellos clubes que disputen la primera ronda de dicho certamen (el rival de San Lorenzo será Atlético Mineiro) ingresarán a sus arcas nada más que 250 mil dólares.

Pero el perjuicio económico no solo es a causa de los premios, también lo será en materia de recaudaciones y venta de abonos a plateas, dado que durante el primer semestre en vez de disputar tres encuentros de local afrontará sólo uno. De ahí que como ya les avisara el presidente Matías Lammens a los sanlorencistas, el mercado de pases será acotado y poco pretencioso.

“No tenemos Copa Libertadores y eso hace que tengamos un mercado de pases no tan ambicioso”, señaló el dirigente. Lo que se verá reflejado en la cantidad de refuerzos que no serán más de dos o tres. Aunque se comprometió a “mantener éste plantel”.

En ese aspecto, aunque San Lorenzo necesita el ingreso de dinero para nivelar la balanza, la idea de la dirigencia azulgrana es la de vender bien a uno de sus futbolistas con el fin de no desarmarle la base del equipo al Pampa Biaggio y hacerse de los dólares necesarios. Por el momento, los jugadores sondeados son el Paulo Díaz, Ezequiel Cerutti y Nicolás Blandi.