En San Lorenzo las lesiones están haciendo estragos. Es tan así, que desde el comienzo de la actual temporada que el Ciclón viene sumando bajas por esa cuestión. Primero fue Rubén Botta, en el amistoso de preparación contra Peñarol; después le tocó a Franco Mussis, en el encuentro ante Estudiantes y ahora el afectado es Bautista Merlini, quien se lesionó en la primera práctica de la semana.
La mala racha la inauguró Botta que al recibir un fuerte golpe en el muslo izquierdo en el final del encuentro amistoso frente al equipo uruguayo mencionado, le debieron realizar un drenaje a causa de una hematoma. Por ese motivo, el volante se perdió los partidos por la Copa Argentina y el arranque de la Superliga.
El siguiente en caer fue Mussis, con una lesión múltiple en la rodilla izquierda. A causa de un fuerte choque con Leandro Desábato, el Gordo terminó con una rotura de los ligamentos cruzado y colateral de la rodilla izquierda más la fractura del platillo tibial. Incluso, aún no pudo ser intervenido quirúrgicamente por lo complejo del cuadro.
El último en sumarse a la lista de bajas fue el Mago Merlini, con una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, en una acción desafortunada durante la práctica del lunes en la cual sufrió un traumatismo rotatorio, sin contacto físico, que motivó una inestabilidad en su rodilla. A partir de la presente jornada, el cuerpo médico azulgrana comenzará a programar la solución al problema en forma quirúrgica.
Así las cosas, el Pampa Biaggio no podrá contar con ninguno de los últimos dos jugadores mencionados, quienes en su consideración eran titulares indiscutidos, ya que les espera un período de recuperación de entre seis y ocho meses. Por ese motivo, San Lorenzo está habilitado a sumar otros tantos refuerzos para reemplazarlos. Aunque por el momento, no lo hará.
Tal vez, la dirigencia azulgrana haga efectiva esa posibilidad cuando a fin de año se abra la ventana de incorporaciones, de acuerdo al gusto del futuro DT.
