Néstor Ortigoza, quien esta tarde se despedirá de sus compañeros, descargó su bronca contra Matías Lammens, presidente del club votado por casi el 80% de los sufragios emitidos en una elección histórica por la cantidad de concurrentes, por no aceptar su pedido de renovarle el contrato por dos años como el quería, en vez de aceptar por una temporada -como le propuso el club- con derecho a ganarse una segunda adentro de la cancha.
“Hay cosas que no puedo explicar. Habría que pedirle a Lammens que también hable”, lanzó Ortigoza, de 32 años, en TyC Sports. “Jugué siempre y rendí, no entiendo por qué no me ofrecieron dos años de contrato”, agregó el jugador, quien, por otro lado, elogió a Marcelo Tinelli, vicepresidente de San Lorenzo en uso de licencia: “Hablé con él, es un fenómeno”.
Para Ortigoza, “la dirigencia no fue justa” al ofrecerle solo un año más de contrato. “Hace siete años que demuestro mi nivel. Siempre quise retirarme en San Lorenzo”, se lamentó. Aunque no reconoció que en el último semestre su rendimiento fue muy inferior a lo hecho anteriormente.
“Si me llamaran de San Lorenzo de nuevo, no sé que haría”, dijo sobre una situación que no parece parte de la realidad. Para él, su ciclo en el club azulgrana, que incluyó tres títulos, ya está terminado.
En el futuro aparece la chance de seguir su carrera en Rosario Central. “Es un grande, juega siempre a cancha llena, me seduce”, dijo Ortigoza, quien ya habló con su amigo Mauro Cetto, actualmente en el club rosarino y ex compañero suyo en San Lorenzo.
Ortigoza jugó cinco años y medio en San Lorenzo, donde participó en dos etapas y ganó el Torneo Incial 2013, la Copa Libertadores 2014 y la Supercopa Argentina 2015. Lástima que antes de la despedida prefirió echar culpas a la dirigencia en vez de admitir su inflexibilidad a la hora de negociar. Una pena. Igualmente, el agradecimiento de los sanlorencistas al Gordo será eterno.
