Finalmente el presidente Matías Lammens confirmó hoy la dificultad para habilitar la cabecera local del Nuevo Gasómetro para recibir a Banfield por la última fecha del torneo de Primera División y adelantó que analiza mudar la localía a “River o Vélez”.
En un breve contacto con la prensa antes de ingresar al predio de la AFA en Ezeiza, el máximo dirigente del Ciclón reconoció que será “muy difícil” que puedan disputar el próximo compromiso en el estadio Pedro Bidegain por un inconveniente en una viga de la tribuna este que demanda un trabajo de más de una semana.
En caso de no poder solucionarlo, Lammens adelantó que las posibilidades son mudarse al estadio Monumental de River Plate o al José Amalfitani de Liniers. Esto se debe a que si no se habilita la tribuna donde acude el grueso de la hinchada azulgrana se perdería mucha capacidad para un partido definitorio.
Por este motivo, la dirigencia analiza cambiar la sede para no perder concurrencia en el duelo ante Banfield que definirá la suerte del equipo dirigido por Pablo Guede en el torneo de Primera División. Tras el triunfo sobre Colón de Santa Fe (2-0) del pasado sábado, el plantel retornará mañana al trabajo en la cancha auxiliar.
Luego de repetir en dos partidos seguidos la formación, Guede deberá realizar al menos dos cambios ya que los defensores Matías Caruzzo y Emmanuel Mas recibieron la quinta tarjeta amarilla y no podrán ser de la partida.
Para buscar la octava victoria consecutiva podrían ingresar el chileno Paulo Díaz o el colombiano Pedro Franco por Caruzzo y el juvenil Lautaro Montoya por Mas.
