jueves, diciembre 18, 2014

Ahora, a por el Real Madrid

Y ahora que dio el gran paso, ¿cómo no va a ir como Ciclón por la hazaña más grande de toda su historia?... ¡San Lorenzo es finalista del Mundial de Clubes! Por oportunismo del Pitu Barrientos y Mauro Matos, el CASLAmérica le ganó sufriendo la semifinal al Auckland City de Nueva Zelanda en su debut mundialista y jugará la final más importante del universo futbolístico a nivel clubes frente al poderoso Real Madrid de Cristiano Ronaldo.

Es verdad que el equipo de Bauza fue mezquino. Es verdad que tuvo un planteo liviano más que ante el modesto Auckland (el conjunto neocelandés tiene a penas 9 profesionales en todo su plantel, y el resto trabajan en otros rubros). Es verdad que el nerviosismo le quitó piernas y sobre todo fútbol a San Lorenzo. Pero lo que nadie puede negar es que consiguió el objetivo de ser finalista por mérito propio y sin recibir ayuda externa.

Si hasta los mismos futbolistas de San Lorenzo y Bauza reconocieron que no se hizo un buen partido. Pero qué importa todo eso en este momento, deben pensar los 4 millones de cuervos que viven por el mundo. El Ciclón cumplió el objetivo principal, y el próximo sábado irá por la epopeya más importante de sus 106 años de existencia. ¿Podrá hacerla Real?

¿Qué si sufrió San Lorenzo con el modesto Auckland City? ¡Sí! A horrores. Prácticamente todo el partido. Pero el Ciclón, por ganas y oportunismo, ganó el partido que tenía que ganar. Y ahora, con la felicidad y la ilusión por las nubes, irá por la hazaña frente al Real para estar en el partido que soñaron todos: jugadores, Bauza y su cuerpo técnico, dirigentes e hinchas. El cruce del que se habló desde que San Lorenzo salió campeón de la Libertadores.

Y por supuesto que por la jerarquía del rival (Cristiano Ronaldo, Bale, James Rodríguez, Isco, Benzema, etc) y el escenario, será el desafío más difícil de toda su historia. Pero las ganas, el entusiasmo, el amor propio y el envión anímico que significa jugar la final con el Real Madrid pueden llevar al San Lorenzo de Bauza a la hazaña, a escribir el capítulo más glorioso de toda su vida.