domingo, enero 12, 2014

El San Lorenzo de Bauza se va armando de a poco

El DT cambió el esquema táctico pasando del 4-2-3-1 de Pizzi a un 4-4-2 o eventualmente a un 4-2-2-2 haciendo solamente un cambio de piezas, ingresando Emmanuel Mas al lateral izquierdo en lugar de Walter Kannemann.

Cuando Edgardo Bauza fue presentado como nuevo entrenador de San Lorenzo admitió que aquello que se había hecho bien en la etapa anterior a la suya iba a ser respetado. Y de movida empezó cumpliendo con esos dichos, ya que en los primeros pasos para delinear su equipo titular dejó en la cancha a la base del conjunto que heredó de Juan Antonio Pizzi.

Lo que sí hizo el Patón fue reordenar a los jugadores en la cancha dejando de lado el 4-2-3-1 con el que San Lorenzo salió campeón para pasar a un 4-4-2 o eventualmente a un 4-2-2-2, de acuerdo a si el equipo tenía la pelota o debía recuperarla.

De arranque Bauza eligió a Torrico; Buffarini, Alvarado, Gentiletti y Mas (en lugar de Kannemann); Romagnoli, Mercier, Ortigoza y Piatti; Correa y Villalba. El desdoblamiento en la mitad de la cancha se dio cuando manejando la pelota el Pipi Romagnoli y Nacho  Piatti se adelantaban a la línea de los dos volantes centrales para estar más cerca de los puntas.

En cuanto al estilo de juego Edgardo Bauza está bastante alineado al pensamiento de Pizzi al detallar en su página web que “yo personalmente elijo la tenencia del balón como prioridad porque me da las herramientas para atacar al rival y defenderme simultáneamente, ya que los contrarios no tienen la posesión”.

Haciendo la aclaración que “para eso se necesita buenos pies de tus jugadores para pasarla y recibirla, es decir, como siempre es muy importante tener buenos jugadores”. A los que en San Lorenzo tiene a su disposición para intentar practicar el juego que más le gusta y que el equipo anteriormente ya mostró.

Pero como para no pecar de lírico también detalla que “existen otros factores importantes como el orden táctico, la estrategia, el compromiso para recuperar la pelota cuando se pierda y la rapidez para agruparse al defender”, ya que “son también situaciones del juego”.

Pero, a su vez, Bauza recalca como una de sus máximas que “si un equipo no trata bien al balón termina corriendo demasiado y con menos posibilidades de controlar el juego”.