El Pipi intensifica sus trabajos. |
Todo pasa, dice un viejo refrán en el fútbol argentino.
Después de siete meses el Pipi Romagnoli está en la última parte de la
recuperación de su operación de ligamento cruzado y menisco externo de su
rodilla izquierda. Es más, para el partido ante Newell’s, el domingo a las 18,10
en el Nuevo Gasómetro, Juan Antonio Pizzi evalúa hacerlo concentrar aunque no para jugar sino para ir reintegrarlo nuevamente al grupo. Esta tarde al ídolo azulgrana le realizarán un estudio isocinético en la rodilla operada, para medir el porcentaje de recuperación muscular. Una vez que el cuerpo médico tenga el resultado analizará cuando le da el alta física y luego le quedará el alta deportiva de parte del cuerpo técnico.
El Diez ya sabe lo que
es salir de situaciones así y sobreponerse tal como le pasó en su rodilla
derecha (que también debió ser sometida a dos artroscopias cuando retornó a San
Lorenzo desde Europa) sufriendo sendas lesiones iguales en enero de 2002 y marzo
de 2003. Con 32 años el Pipi anda con las mismas ganas de jugar de siempre, y
el regreso parece estar pronto.