En el documento, el club afirmó que "nunca faltó a la verdad en sus Declaraciones Juradas presentadas; y siempre informó los montos que efectivamente abonó".
También los dirigentes reconocieron que a raíz de la brusca devaluación del tipo de cambio, el "club se retrasó en el pago de las primas de algunos jugadores", situación que fue oportunamente comunicada a la Superliga.
Además las autoridades "renegociaron ciertos contratos en dólares", con los jugadores afectados por el retraso, con quienes "se acordó la cancelación de la deuda, antes de la finalización de la actual temporada".
"Desde la implementación de este revolucionario Reglamento, el Club ha iniciado una importante reestructuración interna", justificó el comunicado.
Respecto a ese punto, la notificación destacó la "contratación de nuevo personal jerárquico administrativo y de la consultora BDO, para que audite las cuentas, balances y circuitos" de la institución deportiva.
Por último, este esfuerzo que realizó el club, según surge de la notificación, se realizó con el fin de "ajustarse a los nuevos requerimientos de la Superliga".