miércoles, mayo 31, 2017

“Si no renuevo, tengo claro que quiero seguir jugando”

Durante los primeros días de la semana que viene, más precisamente luego del partido ante River, en San Lorenzo comenzará a definirse la situación del cuerpo técnico y la de los jugadores, cuyos contratos vencen el 30 de junio. El primero que la dirigencia quiere abrochar es al uruguayo Diego Aguirre, ya que de su permanencia en el club, en gran parte, dependería el futuro de esos futbolistas.

Uno de ellos, justamente, es Leandro Romagnoli, uno de los sobrevivientes del equipo campeón de la Copa Libertadores 2014. “Quiero seguir en San Lorenzo pero si no renuevo, tengo claro que quiero seguir jugando”, admitió el Pipi quien de no continuar luciendo la casaca azulgrana, con la que dio media docena de vueltas olímpicas, está abierto a escuchar ofertas de otros clubes.

Si embargo, al enganche le tiran los colores del Ciclón y tampoco lo oculta. “Si me ofrecen un contrato hasta diciembre, lo acepto”, reconoció el jugador que más títulos ganó con San Lorenzo en la era profesional. Por lo tanto, la primera opción la tendrá el CASLA pero habrá que ver si la dirigencia la aprovecha o no.

En la misma condición que el actual máximo ídolo de los santos se encuentran los otros Libertadores de América que quedan en el plantel cuervo, es decir Sebastián Torrico, Juan Ignacio Mercier y Néstor Ortigoza. Además del delantero Gonzalo Bergessio. Ninguno de ellos, salvo Jony Ortigoza, es titular a consideración de la Fiera Aguirre. De ahí que Matías Lammens y Bernardo Romeo esperan ansiosos la respuesta del DT con el fin de definir posteriormente cada uno de esos casos.

Al respecto, el Diez sostuvo que en la reunión que mantuvo hace unos días con los dirigentes “les dije mi intención de querer seguir jugando”. Pero antes de tomar una decisión, “ellos están esperando que hace el entrenador”, acotó el volante sanlorencista.

Al Pipi Romagnoli le queda un mes de contrato con el Ciclón y lejos de pensar en el retiro para ponerse el buzo de DT, su deseo pasa por permanecer adentro de una cancha de fútbol. La incógnita es si podrá seguir haciéndolo en San Lorenzo.