lunes, mayo 22, 2017

De las medallas y los laureles a una corona de espinas

La semana en la que San Lorenzo se colgó las medallas del triunfo y se coronó con los laureles de la gloria al ganarle la batalla final a Flamengo para clasificar épicamente a los octavos de final de la Copa Libertadores, terminó con una corona de espinas clavada en su cabeza traducida en una inesperada derrota ante Aldosivi, que llevaba siete partidos sin ganar y cinco sin hacer goles.

Después del esfuerzo físico y del desgaste mental que supuso salir victorioso ante los cariocas, cuatro días más tarde el Ciclón entró a la cancha relajado para recibir al Tiburón. Además, sufrió la baja de cinco jugadores de los considerados importantes dentro del esquema de Diego Aguirre.

Atrás estuvieron ausentes Paulo Díaz y Marcos Angeleri, el ala derecha de la defensa en donde ayer los santos tuvieron grietas profundas. Y en el medio no contó con Néstor Ortigoza, Fernando Belluschi ni con Bautista Merlini, los tres jugadores de mejor pie en el trato de la pelota. Sin dudas, demasiadas ausencias para un equipo que demostró tener un potencial limitado.

Si a todo eso le sumamos la equivocación de Diego Aguirre al plantear el partido con un triple cinco (Pichi Mercier-Franco Mussis-Tino Costa) y sin un conductor definido en el mediojuego (recién lo tuvo cuando en el segundo tiempo metió al Pipi Romagnoli), se conformó un cóctel explosivo que a San Lorenzo le detonó delante suyo cuando Aldosivi se dio cuenta que si iba a buscar el triunfo, lo podía conseguir.

El sinónimo de la pasividad que San Lorenzo exhibió durante los noventa minutos quedó demostrada en el gol de los marplatenses, cuando ninguno de sus jugadores atinó a despejar la pelota rechazada por Navarro tras el cabezazo en el borde del área chica de Lugüercio, permitiéndole a Alan Alegre marcar el gol del triunfo en soledad.

Esta derrota no solo alejó a los cuervos de la lucha por el título sino que también puso en riesgo su clasificación a la Copa Libertadores del año que viene, ya que desaprovechó la posibilidad de ampliar la diferencia con sus inmediatos perseguidores que tampoco pudieron sumar puntos, a los que deberá enfrentar en las próximas fechas.