viernes, octubre 14, 2016

La ilusión de los cuervos va tomando alto vuelo

Con un alto poder de gol y un juego colectivo e individual en ascenso, la ilusión de los hinchas cuervos toma cada vez más altura. El técnico uruguayo Diego Aguirre advierte: “Lo mejor está por venir”.

San Lorenzo no afloja y sus hinchas fantasean cada vez más pensando en hacer realidad la frase que últimamente le gusta repetir a Diego Aguirre, esa que dice "lo mejor está por venir", como si se tratara de un buen augurio de lo que les tocará vivir. Y viendo jugar al Ciclón, esas palabras parecen tener un fundamento muy sólido, que se respalda en las actuaciones del equipo.

Fundamento porque el equipo está convencido de no bajarse de ninguno de los objetivos que persigue (el campeonato, la Copa Argentina y la Sudamericana) y porque el juego colectivo e individual que muestra, sustenta cualquier ilusión.

El ciclo de la Fiera Aguirre tuvo un inicio prometedor ganando sus dos compromisos por la Copa Argentina sin sobresaltos. Pero, a continuación, metió un freno obligado en su carrera a causa de la derrota ante Banfield, por la Copa Sudamericana, y un inesperado empate en la primera fecha del torneo de AFA, de local, ante San Martín de San Juan.

BENDICIÓN PAPAL Y VUELTA AL TRIUNFO
Esos dos traspiés causaron algunas críticas hacia los jugadores y los planteos del cuerpo técnico. Pero después del viaje a Roma, con visita al Papa Francisco incluida, en el primer parate sufrido por el certamen local a causa de las Eliminatorias, el Ciclón comenzó a soplar cada ve con más fuerza.

A su regreso de Italia, los azulgrana consiguieron el primer triunfo del campeonato en Florencio Varela, revirtieron la desventaja ante Banfield con ribetes épicos (con penal atajado por Torrico sobre el final), se prendieron en la lucha por la punta del torneo (ubicándose en el lote de escoltas de Estudiantes), despacharon a Deportivo La Guaira, de Venezuela, para instalarse en cuartos de final de la Copa Sudamericana, y el miércoles se deshicieron de Godoy Cruz, logrando el pase a esa misma instancia de la Copa Argentina.

Pero nada fue magia por Boedo, ya que todo eso San Lorenzo lo consiguió gracias a una evolución experimentada dentro de la cancha a base de fluidez en el trato y en la circulación de la pelota coronada con un alto nivel de contundencia.

De los 12 partido del ciclo Aguirre, el Ciclón ganó nueve, empató dos y perdió uno, con 26 goles a favor (2,16 por partido) y 12 en contra (1 por encuentro), siendo Nicolás Blandi su máximo artillero con 11 gritos, seguido por Fernando Belluschi con 4 y Martín Cauteruccio con 3.

Con semejantes números, la ilusión de los cuervos por seguir compitiendo en los tres frentes toma vuelo y si el equipo del charrúa logra mantener el nivel de juego que viene exhibiendo, da la impresión que podrán terminar el año a pedir de San Lorenzo