lunes, diciembre 21, 2015

EL GASÓMETRO Y LOS VAIVENES DE LA HISTORIA

El Estado Municipal a lo largo de la historia mantuvo una espada de Damócles sobre el mítico Gasómetro de Avenida La Plata. Durante 80 años las aperturas de las calles Salcedo y Muñiz fueron una amenaza para ese asombro urbano que significo el viejo estadio del Club Atlético San Lorenzo de Almagro. La prolongación de estas arterias que amenazaban cortar al Club en 4 partes fue una constante.

En 1935 el Presidente de San Lorenzo Juan Lázzari manifestaba a la prensa escrita esta preocupación por estas ordenanzas municipales y hasta el propio Club pensaba en buscar nuevas tierras para la construcción del Estadio de cemento. Justamente la Institución que contaba con grandes dirigentes, ante la negativa de la familia Onetto (dueños de la mayoría de los terrenos que ocupaba el Gasómetro) de renovarle el contrato de alquiler a San Lorenzo que vencía en 1937, hicieron que el Club en 1935 adquiriera 70 mil metros cuadrados en la Avenida Riestra y Camilo Torres para la realización del Club y Estadio.

Finalmente los Onetto cambiaron de opinión y San Lorenzo terminó comprando los terrenos (36.500 metros cuadrados) que con créditos hipotecarios terminó de pagar en 1944 bajo la presidencia de Enrique Pinto.
En 1949 en las elecciones más politizadas de la historia del Club, los socios no eligieron al candidato de Eva Perón, el Diputado Bernardino Garagusso que prometía hacer de cemento el Gasómetro en Avenida La Plata.

En 1954 a través de la Empresa G.E.O.P.E. se empezó una idea de construir en Avenida La Plata al 1700 un estadio de cemento de 120.000 personas, pero todo quedó en la nada, porque las ordenanzas de apertura de calles fueron uno de los obstáculos, hasta se analizó que las calles Salcedo y Muñiz tengan la prolongación por debajo del Estadio.

En 1965 cuando el Concejo Deliberante de la Ciudad de Buenos Aires aprobó que la ampliación de las tierras (otorgadas a San Lorenzo en 1962), en el entonces Parque Almirante Brown (hoy Bajo Flores) pasen de 25 a 99 años, se produjo una nueva coacción del Estado Municipal a San Lorenzo, cuando el Concejal Meilij intentó que se estableciera en el artículo sexto de la donación, que San Lorenzo debía ceder a la Ciudad, su propiedad privada de Avenida La Plata a cambio de las nuevas tierras, algo vergonzoso que rechazó el resto del cuerpo legislativo.

En 1971 bajo la dictadura de Alejandro Agustín Lanusse, el Intendente de facto de la Ciudad Saturnino Montero Ruiz a través de la Ordenanza 25.770 aprueba el trazado de la Autopista Central que cruza al Viejo Gasómetro y lo parte en cuatro partes, otra vez el Gasómetro es amenazado por el Estado Municipal, San Lorenzo debería dejar su lugar en el mundo, finalmente se corre el trayecto un año y medio después.

En 1976, con la llegada del Proceso de Reorganización Nacional, es el Intendente de Facto el Brigadier Osvaldo Cacciatore quien aprieta al Club a partir de 1978 para que San Lorenzo venda y se vaya de Avenida La Plata, la idea del dictador era hacer un negocio inmobiliario con numerosas torres de edificios en los 36.500 metros cuadrados, encima Cacciatore presiona para que los 4501 metros cuadrados (donde funcionó la Plaza Lorenzo Massa) San Lorenzo la done a la Ciudad para hacer una Escuela para ese complejo habitacional que soñaba Cacciatore.

Confirmando esto con la medida de no habilitar el Gasómetro para el campeonato Metropolitano de 1980, con la excusa que la cancha tenía problemas de seguridad , cuando había que cambiar 20 tablones solamente.

Los dirigentes de entonces (1978-1981) fueron presionados para que San Lorenzo se desprenda de los terrenos, por lo que se obligó al Club a efectuar Asambleas para autorizar la venta del Estadio. El 9 de Diciembre de 1980, llega una misiva a la Secretaría del Club a través del Coronel Tomás Orobio (Asesor de Cacciatore) apretando al Club para que San Lorenzo venda o en caso contrario se pasaría la topadora. Los dirigentes de entonces tuvieron reuniones con el Intendente y fueron amenazados para que vendan, amparados en la Ordenanza de apertura de calles la 38.696, que “curiosamente” fue derogada por el Gobierno Militar , en Febrero de 1983, cuando el Gasómetro ya había sido mal vendido por San Lorenzo dos meses antes.

El Estado Municipal durante ocho décadas coaccionó a San Lorenzo, con las mentirosas aperturas de calles, el Club cada vez que tuvo la oportunidad de hacer de cemento el emblemático Gasómetro, chocó con las ordenanzas, esto fue la base de mi presentación del Proyecto de Restitución Histórica en la Legislatura Porteña el 11 de Noviembre del 2010 y que fuera aprobado el 15 de Noviembre del 2012 por unanimidad.

Ya es hora de que se termine la impunidad del Estado Municipal y haya JUSTICIA (pilar de una sociedad democrática) con el Gasómetro en su lugar, que no es otro que Avenida La Plata al 1700.

Adolfo Res (Historiador del C.A.S.L.A.)
EDITORIAL QUE SALDRA PUBLICADA EN LA EDICION DE MAÑANA DE DIARIO POPULAR