Néstor Ortigoza quiere retirarse en San Lorenzo y si bien todavía es prematuro decir que podrá hacerlo, Horacio Arreceygor, ya como presidente en ejercicio luego de la aprobación oficial de ayer del pedido de licencia de Marcelo Tinelli, tuvo los primeros contactos con el Gordo para ponerse al tanto de la situación de boca el propio jugador.
Más allá de las cualidades futbolísticas, la dirigencia piensa en Orti como un elemento positivo que podría recomponer el vestuario que, entre otros, no contará más con Fabricio Coloccini (enrolado en la otra vereda de los hermanos Romero) y además por la buena relación que guarda con Angel y Oscar de quienes fue compañero en la selección paraguaya.
Más allá de lo que decidan en comisión directiva, los hinchas esperan a Ortigoza con los brazos abiertos y no solo por el recuerdo del penal en la final de la Libertadores 2014, sino por todo lo que se entregó vistiendo la azulgrana en el pecho.
El volante, que en octubre cumplirá 37 años y que juega en Estudiantes de Río Cuarto, tiene ganas de volver pero también tendrá que ver lo que opine el próximo DT. Por eso es que nada puede darse por cerrado, aunque las posibilidades del regreso están latentes.